La exposición al sol después del láser es algo que siempre desaconsejamos a quienes acuden a nuestros centros de depilación, por varias razones que seguramente te interesará conocer. Hay diversos efectos nocivos de la radiación solar que pueden afectar a la piel recién depilada y de los que debes protegerte a lo largo del tratamiento. En este artículo, te explicamos cuáles son y cómo puedes evitarlos.
¿Cuáles son los riesgos de la exposición al sol después del láser?
Son dos los tipos de problemas que podrían aparecer cuando recibes en tu piel la acción conjunta del sol y la depilación láser. Por un lado, existe la posibilidad de que surjan ciertas alteraciones cutáneas y, por otro, el riesgo de que el tratamiento no resulte tan efectivo como se espera.
Tu piel está más sensible
En el láser utilizamos la energía lumínica emitida por el puntero del equipo que llega a través de cada vello hasta el folículo piloso. Lo destruye cuando se transforma en calor y por eso no vuelve a crecer. Es un efecto físico que puede producir en algunos casos una discreta inflamación, que es pasajera. Sin embargo, durante estos días la piel es más sensible y la exposición a la luz solar puede desencadenar una reacción negativa que incrementaría la irritación.
Aumenta el riesgo de lesiones
Exponerte al sol aumenta la temperatura cutánea, sobre todo si lo haces entre las 11:00 y las 16:00 horas, cuando los rayos solares caen de forma casi perpendicular. Si vienes de una sesión de depilación, la piel estará ya caliente por el efecto residual de la luz. Esta combinación de láser y radiación solar puede causar lesiones. En el caso contrario, tomar el sol después de depilarte también hace que se sume el calor producido por los dos factores.
La hiperpigmentación
La melanina es el pigmento que da su color al pelo y a la piel. La luz solar estimula su producción, razón por la que, cuando tomas el sol, se acumula y te bronceas. Si recientemente te has sometido a una sesión de láser, cuando aparece una ligera inflamación o irritación de la piel, existe el riesgo de que la distribución de la melanina se haga de forma irregular.
El resultado podría ser que aparezcan unas manchas de color más oscuro que la piel circundante. Este efecto no deseado tiene el inconveniente adicional de que, a diferencia de las lesiones o la irritación cutánea, que sanan, las manchas tienden a persistir.
Una eficacia reducida del tratamiento
La diferencia de color entre el vello y la piel es lo que facilita la identificación del folículo, para que el láser penetre hasta él a través del vello. Si la piel está bronceada por efecto del sol, la melanina cutánea es más abundante y el contraste de color con el vello resulta menor. Por lo tanto, el láser no se concentra y no llega al folículo con la misma intensidad. En consecuencia, la depilación pierde eficacia por dispersión de la energía lumínica.
Recomendaciones para evitar los riesgos del sol tras el láser
Lo primero que te aconsejamos es evitar la exposición solar directa en las áreas depiladas, pues podría comprometer tanto el resultado del tratamiento como la lozanía y salud de la piel.
¿Cuánto esperar para tomar el sol? Lo que siempre recomendamos es dejar al menos 2 días desde la depilación para tomar el sol, y dar así a la piel la oportunidad de recuperarse. Sin embargo, esto es una estimación: si pasado este tiempo observas que aún hay algo de enrojecimiento, espera un par de días más.
¿Qué precauciones tomar si la exposición es inevitable? En este caso es preciso seguir algunas medidas adicionales después de cada sesión para contrarrestar los riesgos del sol tras el láser:
- Usa todos los días un protector solar de FSP de 30 o más, aunque esté nublado.
- Emplea una cantidad abundante de protector solar, que cubra toda el área depilada. Renuévalo cada 2 horas o antes, si has sudado o nadado.
- Revisa que el producto no esté caducado. El del año pasado no es lo mejor, pues una vez abierto el recipiente, el contenido va perdiendo efectividad.
- Hidrata tu piel después de cada sesión con una crema humectante, reparadora y calmante, y mantén este cuidado durante varios días.
- No te expongas al sol ni al calor durante las horas del mediodía.
- Dúchate después de nadar en el mar o la piscina.
- Lleva ropas cómodas de telas naturales, que cubran bien la zona depilada.
- No uses maquillaje, perfume o desodorante hasta que ceda la inflamación. Si no se presenta, empléalos de la forma acostumbrada.
- Mantén una buena hidratación tomando líquidos con frecuencia.
El tratamiento definitivo de depilación láser tiene como propósito eliminar el vello no deseado para brindarte más comodidad y mejorar la tersura de la piel. Además, te evita recurrir a métodos como la cuchilla o la cera, que tienen varios inconvenientes y es necesario repetir con frecuencia. Sin embargo, la exposición al sol después del láser es un riesgo que debes controlar. Cuida tu piel y asegura la eficacia del tratamiento siguiendo nuestras recomendaciones.