Aunque no se ha establecido un mínimo de edad para la depilación láser, hay aspectos a tener en cuenta a la hora de tomar esta decisión cuando se trata de los más jóvenes. La pubertad es una etapa de inestabilidad hormonal y de cambios físicos, emocionales y mentales. Hay que considerarlos cuando se está evaluando la posibilidad de eliminar el vello facial o corporal de manera permanente.
El láser en los jóvenes
La imagen es un tema muy importante entre los adolescentes, e incide con fuerza en las relaciones sociales que se establecen durante la primera juventud. Encajar en el grupo de amigos puede convertirse en un problema para algunos, y la reacción más común es la ansiedad.
¿Qué sucede en la pubertad?
Entre los 9 y los 14 años se inicia para ambos sexos el proceso de maduración sexual. Aumenta considerablemente la secreción de hormonas, como los estrógenos y la testosterona, generando diversos cambios en el organismo. Uno de los más evidentes es el desarrollo del vello, que se hace abundante, grueso y oscuro en varias zonas del cuerpo y en la cara.
La necesidad de corresponder con los patrones estéticos imperantes puede llevar a someterse a la depilación láser antes de lo recomendable. A veces, el vello facial o corporal es excesivo por razones genéticas o de enfermedad, lo que se llama hirsutismo. Corregir este síntoma podría ser muy beneficioso desde el punto de vista social y psicológico.
Por otra parte, las patologías como la foliculitis o el acné requieren una evaluación médica previa. Los tratamientos que se hayan prescrito podrían causar fotosensibilidad, aspecto que debe consultarse con el dermatólogo. En algunos casos, la supresión del vello contribuye a mejorar la higiene, reducir la secreción sebácea y eliminar la proliferación bacteriana, factores relacionados con estas dos afecciones.
¿Es efectivo el tratamiento en los adolescentes?
Los padres, madres o personas a cargo que valoran positivamente la opción del láser en jóvenes deben discutirla con el adolescente, para que haya un consenso. Entre los aspectos a revisar, seguir el cronograma de sesiones establecido resulta esencial para que la depilación sea realmente definitiva. También se decidirá cuáles son las zonas donde el vello no deseado debe eliminarse.
Además de un acuerdo para iniciar el tratamiento, hay que observar ciertas condiciones mínimas. Por ejemplo, la efectividad del láser puede disminuir debido a las fluctuaciones hormonales, que generan variaciones en el ritmo de crecimiento del vello y en su distribución corporal.
Por esta razón, los folículos pilosos deben haber culminado su desarrollo para realizar la depilación láser en adolescentes. En el caso de las chicas, conviene esperar a que cumplan los 16 años, o hasta que hayan ocurrido las primeras menstruaciones. En el varón, la aparición del vello corporal tiene una distribución distinta, que tarda más en estabilizarse, lo que suele suceder cerca de los 18 años.
El consentimiento escrito
Un requisito indispensable, que se exige en todos los centros de depilación, es el consentimiento por escrito para realizar este tratamiento. Debe estar firmado por los padres o las personas a cargo del joven, que de esta forma se hacen responsables de la administración del tratamiento y de seguir las instrucciones del personal técnico para obtener los mejores resultados.
En este documento se explicará cuál es el número de sesiones necesarias, la duración del tratamiento y los resultados esperados. También deben mencionarse los posibles efectos no deseados, como las irregularidades de la pigmentación o las lesiones, así como las medidas para evitar que aparezcan.
Tener expectativas realistas es fundamental en el caso de los adolescentes. La secreción hormonal elevada constituye un potente estímulo para el crecimiento del vello facial o corporal. En consecuencia, es posible que el tratamiento necesite algunas sesiones adicionales, o que las de mantenimiento se realicen con una frecuencia superior a la habitual.
¿Qué zonas suelen tratarse primero en los adolescentes?
En este aspecto, la opinión del o de la joven es lo que tiene más relevancia, ya que cualquier región del cuerpo es susceptible de ser depilada con éxito. Si hay un problema con el vello corporal en una zona determinada, que afecte negativamente a la autoestima del adolescente, lo más probable es que sea muy fácil tomar la decisión.
Después de cumplir la edad mínima para la depilación láser, eliminar el vello facial puede ser lo prioritario cuando estamos ante un problema de foliculitis o de hirsutismo, ya que esto puede generar un estigma social en ciertos ambientes. En las chicas, depilar las piernas o las axilas puede ser lo más importante, especialmente cuando se usan faldas o blusas sin mangas.
Las zonas hormonales como las ingles o la línea del bikini suelen ser motivo de preocupación para el sexo femenino cuando se usa bañador. Al recibir un estímulo hormonal muy acentuado, esta pilosidad suele ser gruesa, oscura y densa, lo que crea un problema estético.
La edad para la depilación láser no es una contraindicación: sigue siendo un método seguro, eficaz y no invasivo, siempre que se observen las condiciones descritas, que exigen una atención especial. En nuestros centros, designamos al personal técnico de mayor experiencia para atender a cada adolescente como se merece.