La irritación en la depilación láser es uno de los efectos esperados en el tratamiento de eliminación definitiva del vello. Sin embargo, en algunos casos es posible que se presente una reacción excesiva y haya que tomar algunas medidas adicionales. ¿Cómo identificar esta situación y qué debes hacer si se presenta?
¿Qué es una reacción normal tras el láser y qué no lo es?
Tener la piel sensible tras la depilación entra dentro de lo normal. Después de cada sesión es habitual que aparezca una leve inflamación en la zona tratada, con algo de dolor al tacto, aumento de volumen y enrojecimiento, lo que puede durar algunas horas o hasta un día. Es señal de que los folículos han sido destruidos y, transcurrido este tiempo, las molestias desaparecen progresivamente.
Se trata de una reacción que se presenta con más frecuencia en zonas como las axilas o las ingles, que están sometidas al roce y tienen una piel fina y más vascularizada. ¿Cómo calmar la piel? La aplicación de compresas frías o hielo envuelto en una toalla suele ayudar a aliviar el dolor y a reducir la inflamación. Sin embargo, y a pesar de estos cuidados, es posible que el fenómeno se prolongue o se agrave y se acompañe de otros síntomas.
¿Cuándo debes preocuparte y cómo actuar?
La sensibilidad particular de cada persona o el hecho de no haber seguido las indicaciones del técnico de depilación pueden ser algunas causas de que la inflamación y el enrojecimiento por el láser sean más acentuados de lo esperado. Además, otros signos pueden sugerirte que algo no marcha bien:
- Calor local que no cede con las compresas frías.
- Enrojecimiento que tiende a empeorar.
- Hinchazón o aumento del volumen de la zona.
- Dolor continuo o excesivo.
- Presencia de ampollas, pus o costras.
- Fiebre.
- Cambios de color en la piel.
¿Cómo actuar si tu piel presenta irritación tras una sesión de láser? La aparición de estos síntomas te indica que debes comunicarte con tu centro de depilación y acudir a la consulta médica. Es probable que necesites algún tratamiento para desinflamar la piel y calmar el dolor.
¿Cuáles son las pautas básicas de cuidados y los productos recomendados?
Ceñirte a las indicaciones que se te proporcionan en cada sesión es esencial para que el tratamiento de depilación se desarrolle con normalidad. Entre las pautas que damos a quienes acuden a nuestros centros, figuran las siguientes:
¿Qué hacer antes de la sesión?
Cuando llegue el día de acudir a la cita, rasura la piel usando un gel o espuma, con una cuchilla nueva y en el sentido del crecimiento del vello, suavemente. Esta precaución mejora la efectividad del láser y la higiene de la zona.
Evita también el maquillaje y el uso de sustancias irritantes como el alcohol, los exfoliantes y los desodorantes. La piel debe estar limpia, rasurada y libre de cualquier clase de cosmético.
La hidratación, un recurso esencial
La aplicación de hidratantes antes y después de las sesiones contribuye a restaurar la piel, que puede presentar algo de sequedad tras la aplicación del láser. Es importante que sean productos de buena calidad y contengan glicerina y aloe vera, que hidratan profundamente y contribuyen a regenerar la piel, además de controlar la inflamación y el enrojecimiento. El gel Post Depil Cotton y Aloe Vera de Elha Laser está concebido especialmente para proteger y calmar las zonas recién depiladas.
Protegerte del sol
Recibir la radiación solar sin protección en las horas en que el sol incide con más fuerza provoca fotoenvejecimiento, que es producto de un daño a la piel acumulativo e irreversible. Evita la exposición directa, usa sombrero, ropa amplia y holgada y protector solar de FPS 30 o más durante al menos 3 días antes y después de cada sesión.
Entre los cuidados postláser este es uno de los más importantes. La razón para protegerte es que la piel quemada por el sol acumula calor, que se suma al generado por la luz láser. Los dos efectos, recibidos de forma casi simultánea, pueden causar manchas o lesiones cutáneas.
La ropa que te conviene usar
La sudoración excesiva es uno de los factores que puede causar irritación de la piel. En algunos casos, la acumulación de humedad crea un ambiente propicio para la proliferación bacteriana, lo que, unido a la fricción de la ropa, puede causar una foliculitis, o infección de los folículos pilosos.
La ropa más adecuada para después de una sesión de láser debe ser amplia, holgada, y hecha con telas naturales. Es importante que las prendas sean suaves y ligeras, para no producir roce, y de colores claros, que favorecen la evaporación del sudor.
Evita las ropas ajustadas, especialmente en las ingles y las axilas, así como las telas sintéticas, que no transpiran. Después del baño, no frotes con fuerza la zona tratada: es preferible dar toques suaves para secarte.Es muy importante que cuides tu piel y la protejas durante el tratamiento de depilación permanente con láser, antes y después de cada sesión. Si a pesar de seguir nuestras recomendaciones, observas que la irritación con la depilación láser es excesiva, comunícate con tu centro y acude a la consulta médica.