A medida que avances con tu depilación láser, observarás que el vello se hace más ralo, reduciéndose en densidad y grosor. Sin embargo, debido a un conjunto de factores que explicaremos más adelante, algo de vello tiende a reaparecer cuando han transcurrido varios meses de finalizado el tratamiento. Puede que ese sea el momento de solicitar a tu centro las sesiones de repaso en la depilación láser.
¿Qué son las sesiones de repaso en la depilación láser?
Las sesiones de repaso se realizan un tiempo después de haber completado la depilación con láser. Son más cortas y espaciadas que las del tratamiento inicial, con una periodicidad semestral o anual, en promedio. Tienen el propósito de suprimir el vello residual o el que eventualmente vuelva a crecer, y así te olvidarás para siempre de la cuchilla y la cera.
También se denominan sesiones de mantenimiento de la depilación láser, porque aseguran que la eliminación del vello no deseado sea definitiva. Como resultado, el vello se hará progresivamente más fino y ralo, hasta que desaparezca por completo y llegue el momento de no necesitar ninguna más.
¿Cuál es la frecuencia ideal de repaso del láser?
Las sesiones de repaso se administran con una frecuencia que puede cambiar según la zona a tratar y la respuesta del vello al tratamiento. Lo ideal en la mayoría de los casos es una o dos sesiones de repaso al año, que son necesarias para garantizar la eliminación permanente. Sin embargo, hay varios factores que inciden en esta periodicidad. Entre ellos, figuran el estado hormonal, el sexo, la edad y la velocidad de crecimiento específico en la zona ya tratada.
El desarrollo de los tejidos ocurre porque reciben un estímulo hormonal. En el caso del vello, este se debe básicamente a la testosterona, conocida como hormona masculina. Aunque existe en ambos sexos, se detecta en los análisis de sangre con niveles mucho más altos en los hombres. Por esta razón, en el sexo masculino el vello crece a mayor velocidad que en el femenino.
Por otra parte, los jóvenes de ambos sexos tienen niveles hormonales más elevados que las personas mayores. Debido a esto, los folículos reciben un mayor estímulo y desarrollan un vello denso y grueso con más facilidad.
La zona del cuerpo es también otro factor importante para la velocidad del crecimiento, ya que es más acelerado en las zonas hormonales, las que reciben un mayor estímulo. En la mujer, estas regiones son la línea alba, el rostro, la zona íntima, las areolas, el escote y la región lumbar. En los hombres, la cara, la espalda, el pecho y la zona íntima.
En estos lugares, la frecuencia del repaso del láser puede ser mayor que en otros, como las axilas, los glúteos, los brazos o las piernas, donde el vello crece con más lentitud. Si te has depilado alguna de las zonas hormonales, puede que necesites más de una o dos sesiones al año, y el repaso del láser sería cada pocos meses.
¿Por qué necesitas las sesiones de repaso?
Ya mencionamos que la depilación de las zonas hormonales y la juventud son factores que influyen para que puedas necesitar las sesiones de mantenimiento con más constancia. Pero si observas que reaparece vello en un área ya depilada, quizá sea el momento de concertar una cita. Es probable que hayan actuado dos aspectos, comunes a todas las personas que se someten a la depilación láser:
1.- Las fases del ciclo del vello
El vello tiene un ciclo vital de tres fases consecutivas: la catágena o de transición, muy corta, la telógena o de reposo y la anágena o de crecimiento, que es la más prolongada. El láser actúa únicamente en la tercera etapa, cuando el folículo está unido al vello. La energía lumínica puede entonces atravesarlo para llegar hasta la raíz y destruirla.
Estas fases no ocurren de forma simultánea en todos los folículos. En las diferentes zonas a depilar, los vellos van entrando de forma progresiva en la fase anágena. Por esta razón, las sesiones de repaso sirven para pillar a los que quedaron como residuales del tratamiento anterior, porque estaban en transición o en reposo.
2.- La aparición de nuevos folículos
El estímulo hormonal y la tendencia genética pueden provocar la aparición de folículos que no existían durante la depilación láser. Estos aparecen por primera vez, de modo general, en las áreas que originalmente tenían gran densidad pilosa, aunque son más finos y dispersos. También son eliminados cuando te haces las sesiones de repaso.
Duración de los resultados del láser
La depilación con láser es un tratamiento no invasivo, seguro y eficaz para erradicar de forma definitiva el vello corporal y facial. Un tratamiento de 8 a 10 sesiones más una o dos de repaso al año suele ser suficientes en la mayoría de los casos para tener un aspecto impecable. Sin embargo, aunque puedas necesitar algunas más por tus condiciones particulares, la duración de los resultados del láser siempre será permanente. Las sesiones de repaso en la depilación láser son la mejor forma de completar el tratamiento para obtener una piel lisa, suave y sin vello. Confía en el profesional que te atenderá en nuestro centro, plantéale tus dudas con confianza y déjate asesorar para conseguir tu objetivo.
